Uno de los vehículos que más ha causado sensación en estos tiempos es la Ford F150 Lobo Raptor, una parte por sus titánicas dimensiones (para hoy en día), pero sin duda por su habilidad de recorrer caminos irregulares gracias a la increíble suspensión que incorpora. Al llegar la tercera generación de esta pickup todo terreno, Ford México nos invitó a manejar la versión 2022 junto con su hermana menor la Ranger raptor en un hábitat más acorde a sus capacidades

La cita fue en las instalaciones de ProMX, también conocida como Finca de los Abuelos, en el municipio de Villa Victoria en el Estado de México. Al ser la cita a las 9 de la mañana el trayecto de ida aún nos tocó varios tramos con mucha neblina (recordándome al videojuego de Sillent Hill).

Al llegar a esta locación (gracias a Google Maps) nos realizaron las respectivas pruebas COVID y al salir negativos, accedimos a este evento. Aún con la neblina en su punto, pudimos apreciar las unidades que íbamos a manejar, pero no las pistas (dándole un toque de sorpresa).

La Lobo Raptor sigue impresionando aun estando detenida, con un largo total de 5.9 metros, 2.4 metros de ancho (sin espejos) y una altura de 2 metros no hay manera que no la notes. Si con sus dimensiones no es suficiente, con el diseño exterior reafirmará lo corpulento que es.

En el frente tendremos la enorme parrilla en color “gun metal” con la palabra FORD resaltada, al igual que la versión anterior, tendremos 3 luces arriba de la parrilla que estrenan nuevo diseño. Los faros LED ahora son totalmente rectangulares e integran la tecnología Dynamic Bending con ajuste de altura. A los costados estrena diseño los rines de 17 pulgadas que hacen conjunto con unas llantas de 35 pulgadas con dibujo profundo para las superficies resbalosas. Mientras que en la parte trasera solo sufrió un cambio en las luces que también incorporan la tecnología LED. Cabe mencionar que, por las dimensiones, también tendremos luces en los extremos de esta camioneta (como si fuese un tráiler).



En lo que de disipaba la neblina tuvimos la presentación de la nueva Ford Lobo con sus características. Continúa el motor V6 3.5L biturbo que produce 450HP y 580 lb/pie de torque, también tendrá la transmisión de 10 velocidades, tracción 4×4 con diferencial frontal Torsen. Con la distribución de tracción a demanda, la Raptor puede tener tracción totalmente trasera (2H), tracción 4×4 de alta velocidad (4H), tracción 4×4 de baja velocidad (4L) y la que distribuirá de manera automática. 7 modos de manejo complementarán el uso de la tracción, entre ellas tendremos los modos Normal, Sport, Remolque/ Arrastre, Resbaladizo, Nieve Profunda/Arena, Roca y Modo Baja, los cuales cambie la respuesta del pedal, los cambios de la transmisión, la firmeza de la dirección y hasta la suspensión.

A pesar de ser la presentación de la Lobo Raptor, también tuvimos oportunidad de manejar la Ranger Raptor. Esta “Baby Raptor” va a tener un desempeño bastante similar a su hermanda mayor, teniendo la posibilidad de brincar y conducir por caminos sinuosos con la ventaja de que no es tan voluminosa. Esta pickup tiene un motor diésel de 4 cilindros biturbo de 2 litros que genera la cantidad de 210 HP y 369 lb/pie de torque. Igual tendremos una transmisión automática de 10 velocidades, tracción 4×4 con modos de manejo.


Para las pruebas, dividieron a los invitados en dos grupos, uno de ellos iría directamente a las camionetas mientras que el otro esperaría su turno en una “sala” que preparó Ford. A mí me tocó el grupo que los mandaron directamente a las camionetas y nos asignaron subirnos primero a la Ranger Raptor.

Había tres pruebas que haríamos con las camionetas, la primera fue un recorrido por un circuito de motocross, el cual fue adaptado para las camionetas (debido a que no íbamos a «volar» como los motocross). La primera vuelta la hizo el instructor para explicarnos el trazado exprimiendo cada centímetro a la pista y exigiéndole al acelerador lo más posible, a pesar de ser una vuelta de reconocimiento llegamos a tener derrapes en ciertas curvas ya que se había elegido la tracción trasera. La segunda parte sólo la hizo el instructor debido a que sería una prueba de mayor velocidad con pequeños brincos, aquí pudimos notar todo el potencial que tiene esta camioneta para absorber los impactos cuando las ruedas dejan de tocar por unos instantes el piso. La última parte de estas pruebas fue una pequeña pista con obstáculos para las capacidades todoterreno, entre ellos tuvimos que cruzar un tramo inundado para el vadeo, de ahí nos pasamos a la prueba de flexión de la suspensión que con los neumáticos llenos de lodo le daría un poquito más de reto. Ahí continuamos a la parte del piso de piedras y terminamos con el ascenso de una pendiente. Siendo una camioneta «mediana», estas pruebas nunca fueron algún obstáculo serio para Ranger Raptor, demostrando todo el potencial que presume su hermana mayor.





Después de terminar las pruebas con la Ranger pasamos a la Lobo, a primera vista el espacio de la cabina es enorme, uno puede ir en el asiento trasero cómodamente aún teniendo los delanteros hasta atrás. Al conducir la Lobo notamos la gran diferencia de proporciones, el volante parece timón de lo grande que luce. El desempeño de la Lobo es impresionante, al mínimo toque del acelerador la camioneta empieza a desbocar el motor biturbo, también pudimos notar la diferencia de “tonelaje” al maniobrar en el sinuoso circuito de motocross siendo un vehículo muy divertido. De vuelta al asiento de pasajero para la prueba de velocidad, la Lobo hace que el aterrizaje después de los brincos sea aún más suaves, esto gracias a su suspensión Fox Shocks Live Valve 3.1 que se adapta según lo que los sensores van recopilando mientras uno conduce y al momento de tener las llantas en el aire, los amortiguadores se ajustan para soportar todo el tonelaje de la Lobo al volver a tocar tierra. En la parte de los obstáculos, si la Ranger las hizo sin alguna complicación, en la Lobo fue más fácil lograrlo gracias a sus llantas de 35 pulgadas y la distancia entre el piso a la cabina. Pasando las pruebas de flexión sin golpear como lo hizo la Ranger y en el piso de piedras tuvimos un trayecto bastante suave para estas condiciones para terminar con la conquista del pequeño monte que tenía el trayecto.







Al terminar las pruebas, nos llevaron a un costado de la pista para que pudiéramos ver a las Lobo y las Ranger en acción (con los instructores conduciendo), haciendo maniobras un poco más salvajes como brincar en pendientes de la pista de motocross, haciendo volar las pickups demostrando que nacieron para eso.




Con la gama Raptor, no tenemos duda que fueron creadas para la diversión fuera del asfalto, las suspensiones de ambas camionetas son una de las mayores ventajas que tienen dándole el desempeño de un vehículo todoterreno con la diferencia de que estas pueden “correr” en la terracería. La Ranger Raptor tiene la ventaja de ser más practica por el espacio, principalmente para si estás en la ciudad y necesitas encontrar un lugar de estacionamiento. Pero en el caso de la Lobo, solo queda decir es un gran juguete, desde el momento en que la ves estacionada te saca una sonrisa por todas las aventuras que puedes tener al conducirla, claro, de preferencia fuera de la ciudad.








Texto y fotos: Alejandro Gelista L.